Sin palabras:
¿Sabían que la de médico es una de las profesiones con mayor índice de suicidio? Pues así es. Estrés, horarios de trabajo infinitos, salarios bajos para la enorme responsabilidad que detentan (de los más bajos de Europa en relación a sus compañeros), son algunos de los motivos que llevan a los galenos a quitarse la vida.
A ellas hay que añadir la exagerada burocracia que rodea a su desempeño o la alienación que supone no disponer de tiempo para escuchar a los ciudadanos en la consulta, así como las presiones que reciben de los laboratorios farmacéuticos para ser meras máquinas extienderecetas.
Este es uno más de los síntomas de que el sistema sanitario actual está enfermo. No son pocos los trabajos científicos que documentan la práctica del suicidio entre los profesionales sanitarios. El estudio El proceso de las intenciones suicidas entre los médicos: Factores predictores en una muestra longitudinal noruega, publicado en junio de 2004 en el Journal of Affective Disorders, así lo indica.
De manera triste aunque curiosa, los suicidios se producen dos veces más entre el colectivo de los veterinarios. Una de las causas es la visión que se tiene en la medicina veterinaria sobre la eutanasia, una manera de terminar con el sufrimiento de los animales, fundamenta la literatura científica publicada.
No deja de ser curioso también que las mujeres sanitarias se suicidan mucho más que sus compañeros de oficio. Así lo argumenta un trabajo publicado en la prestigiosa revista médica Journal of American Medical Association (JAMA). El trabajo tiene un título elocuente: Suicidio en doctores (JAMA 2001 May;55:296-300).
Otro trabajo científico realizado por el Departamento de Salud Pública de la Universidad de Oxford, que lleva por título Mortalidad en los médicos de diferentes especialidades, publicado en la revista Occupational and Environmental Medicine, (Vol 54, 388-395) abunda en lo mismo; las enormes tasas de suicido de las mujeres dedicadas a la medicina.
Dentro del colectivo médico, uno de los especialistas que más se quitan la vida son los psiquiatras y es que no deja de ser paradójico que los trabajos científicos digan que los sanitarios presentan numerosos problemas mentales derivados de su práctica laboral.
En 2003, de nuevo JAMA publicó un estudio llamado Enfrentando la depresión y el suicido en los psiquiatras (JAMA.2003;289:3161-3166.), que concluye que los psiquiatras no reciben un tratamiento sanitario adecuado.
Se ha comunicado repetidas veces que el índice de suicidio en los médicos es superior al de la población general o de otros sectores universitarios, pero persisten dudas al respecto. En este estudio se calcularon las densidades de incidencia de suicidio a través de un metaanálisis y la evaluación sistemática de la calidad de los estudios más recientes.
Los estudios sobre los índices de suicidio en la población médica se localizaron en MEDLINE, PsycINFO, AARP Ageline y EMB Reviews: Cochrane Database of Systematic Reviews utilizando los términos «médicos», «doctores», «suicidio» y «mortalidad ». Se incluyeron los estudios publicados a partir de 1960 inclusive, que aportaban datos sobre los índices de suicidio de los médicos, estandarizados según la edad, y de su población de referencia, o que ofrecían datos extraíbles sobre el suicidio en el colectivo médico; 25 estudios cumplían los criterios exigidos. Los examinadores extrajeron los datos y valoraron la calidad de cada estudio. Se examinaron la heterogeneidad y el sesgo de publicación de los estudios, que fueron estratificados según el año de publicación, el seguimiento y la calidad. Se agruparon los tamaños de efecto utilizando un modelo de efectos fijos (mujeres) y un modelo de efectos aleatorios (varones).
La densidad de incidencia total de suicidios en los médicos, comparado con la población general, fue 1,41, con un intervalo de confianza (IC) del 95 % de 1,21-1,65. En las mujeres médicas, la proporción fue 2,27 (IC 95 % = 1,90-2,73). El análisis visual de las gráficas en embudo de las pruebas que examinaron la posible presencia de un sesgo de publicación reveló el carácter aleatorio en los varones e indicios de sesgo en las mujeres, con una carencia de estudios relativa, no significativa, en el cuadrante inferior derecho.
Los estudios del suicidio en la población médica muestran, en general, unas densidades de incidencia de suicidio entre ligeramente elevadas (varones) y muy elevadas (mujeres). Estudios de mayor envergadura deberían ayudar a clarificar si el índice de suicidios de las mujeres médicas es realmente elevado o es atribuible al sesgo de publicación.
Los estudios sobre los índices de suicidio en la población médica se localizaron en MEDLINE, PsycINFO, AARP Ageline y EMB Reviews: Cochrane Database of Systematic Reviews utilizando los términos «médicos», «doctores», «suicidio» y «mortalidad ». Se incluyeron los estudios publicados a partir de 1960 inclusive, que aportaban datos sobre los índices de suicidio de los médicos, estandarizados según la edad, y de su población de referencia, o que ofrecían datos extraíbles sobre el suicidio en el colectivo médico; 25 estudios cumplían los criterios exigidos. Los examinadores extrajeron los datos y valoraron la calidad de cada estudio. Se examinaron la heterogeneidad y el sesgo de publicación de los estudios, que fueron estratificados según el año de publicación, el seguimiento y la calidad. Se agruparon los tamaños de efecto utilizando un modelo de efectos fijos (mujeres) y un modelo de efectos aleatorios (varones).
La densidad de incidencia total de suicidios en los médicos, comparado con la población general, fue 1,41, con un intervalo de confianza (IC) del 95 % de 1,21-1,65. En las mujeres médicas, la proporción fue 2,27 (IC 95 % = 1,90-2,73). El análisis visual de las gráficas en embudo de las pruebas que examinaron la posible presencia de un sesgo de publicación reveló el carácter aleatorio en los varones e indicios de sesgo en las mujeres, con una carencia de estudios relativa, no significativa, en el cuadrante inferior derecho.
Los estudios del suicidio en la población médica muestran, en general, unas densidades de incidencia de suicidio entre ligeramente elevadas (varones) y muy elevadas (mujeres). Estudios de mayor envergadura deberían ayudar a clarificar si el índice de suicidios de las mujeres médicas es realmente elevado o es atribuible al sesgo de publicación.
Mensaje en Una Botella:
" sin palabras"...
"con muchas preguntas, y aqui sin palabras"..
" no se puede cerrar los ojos a tamaÑa realidad"
" no es para reir, no es para llorar, es para encontrar soluciones...no es para negar un elefante..es para tomar conciencia de que hoy pudo ser el, maÑana.....quien sabe.."...
" fortaleza y fe"...
Aborigen
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